Un chorrito de limón y un poquito de pimienta sobre un plato rebosante de almejas, suponen la quinta esencia del mejor festín. Un placer gastronómico que podemos consumir sin ninguna culpabilidad, especialmente, cuando son tantas las propiedades de las almejas en lata.
Está considerada por muchos científicos como el “animal” más antiguo del mundo. Este molusco milenario entiende de tantas recetas como formas de degustación, especialmente si se consume al natural, la mejor forma de experimentar los siguientes beneficios de las almejas:
Alto contenido en hierro
La cantidad de hierro de las almejas es tal que puede superar a los índices de otros animales como el buey. Una ración de unos 100 gramos diarios contiene unos 24 mg de hierro, cantidad recomendada para las personas adultas, especialmente si sufres de anemia o estás embarazada.
Calcio
Las almejas contienen numerosos minerales, entre ellos potasio, fósforo, cobre, mangnesio, yodo o calcio. Este componente favorece el desarrollo de los huesos, fortalece los dientes y fomenta la masa muscular.
Vitamina B12
Otro de los beneficios de las almejas es que contienen vitamina B12, la encargada de mantener sanas las neuronas y los glóbulos sanguíneos y es esencial en los procesos metabólicos del cuerpo.
Omega-3
Las almejas son bajas en grasas (unos 100 gramos contienen tan solo 70 calorías), por lo que son grandes aliadas en cualquier dieta. Parte de su componente graso es rico en omega-3, ideal para frenar el colesterol.
Y ahora que ya conoces las propiedades de las almejas, Frinsa pone a tu disposición las mejores almejas en lata al natural, de gran tamaño y perfectamente limpias, para traerte los secretos del mar a una mesa llena de posibilidades.