A algunos les encanta y otros no lo pueden ni ver. Lo que está claro es que ha sido un elemento estrella de toda dieta sana y equilibrada desde hace generaciones. Tanto es así, que sus vitaminas y propiedades casi se dan por hecho. Pero ¿cuáles son realmente las vitaminas del pescado? ¿qué beneficios nos aporta en realidad? Sigue leyendo y lo descubrirás.
Los nutrientes que contiene el pescado
El pescado es un alimento la mar de completo ya que, en una sola ración, aporta gran cantidad de propiedades que si tuviéramos que enumerar haríamos un post infinito. En las siguientes líneas encontrarás algunas de las más destacables:
Proteínas de alto valor biológico: posee un contenido proteico que varía entre el 15 y el 24% según el tipo de pescado. Estas proteínas son de alto valor biológico ya que aportan aminoácidos esenciales que el cuerpo no puede producir por sí solo y ha de adquirir a través de la alimentación. Como por ejemplo la metionina, cisteína, treonina, lisina (esenciales en el crecimiento de los niños) y el triptófano, que juega un papel importante en la formación de la sangre. Las proteínas, a su vez, favorecen la formación de tejidos y ayudan a la recuperación muscular, por lo que son esenciales en dietas deportistas.
Omega 3: de las propiedades del pescado por excelencia. Estos alimentos con Omega 3, en especial la variedad de pescado azul, contribuyen a reducir el colesterol malo en sangre y ayuda a prevenir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Vitaminas: el pescado es rico en vitaminas del grupo B (B1, B2, B3 y B12), que favorecen el correcto funcionamiento del sistema nervioso, del metabolismo, mantenimiento de la salud ocular y de los tejidos y formación de glóbulos rojos. También aporta vitamina A, que estimula la visión normal y el sistema inmune. Abundante vitamina D, esencial para la salud ósea y cardiovascular, y vitamina E que actúa como antioxidante.
Fuente de minerales: entre los nutrientes del pescado destaca la gran cantidad de minerales que aporta como el hierro, calcio, fósforo y potasio. Que favorecen la prevención de anemias, mantenimiento de huesos y dientes, promueve las funciones cognitivas y contribuyen al funcionamiento normal de todo el organismo.
Propiedades y beneficios del pescado
Con esta retahíla de propiedades no es de extrañar que el pescado sea un alimento tan beneficioso. Aquí van algunos de sus beneficios:
Apto para dietas de adelgazamiento: en especial la variedad de pescado blanco que posee menos de un 3% de grasa (un porcentaje considerablemente menor que la carne). Por lo que es ideal para perder o controlar el peso.
Estimula las capacidades cognitivas y el desarrollo intelectual: el aporte de minerales como el fósforo o el zinc y vitaminas como la B12 que aporta el pescado, favorecen el correcto funcionamiento del sistema nervioso. Además, estimulan habilidades y funciones cognitivas como la concentración, la memoria y el aprendizaje.
Favorece el mantenimiento de los huesos y músculos: el aporte de calcio es otro de los beneficios del pescado (sobre todo si se come con espinas) y es esencial para el mantenimiento de la salud ósea y dental. Ello, unido al aporte de vitamina D, hace que el calcio se absorba mejor. Y que, por tanto, suponga un mayor beneficio para huesos y dientes. Además, el elevado aporte de proteínas de alto valor biológico favorece la recuperación muscular tras el ejercicio, así como su regeneración y mantenimiento.
Prevención de enfermedades cardiovasculares: el pescado azul posee una elevada cantidad de ácidos grasos de Omega 3 que tienen un efecto hipolipemiante. Es decir, tienen la capacidad de reducir la presencia de grasa en sangre. Evitando así que se pueda acumular en las arterias y pueda dar lugar a enfermedades coronarias.
Fácil digestión: el pescado posee proteínas poco fibrosas y un nivel reducido de colágeno, lo que lo hace mucho más tierno y fácil de digerir. Siendo una opción perfecta para aquellas personas con estómago delicado o digestiones pesadas.
Refuerza el sistema inmune: previene el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Además, el Omega 3 también contribuye a fortalecer las defensas ya que ayuda a combatir los procesos inflamatorios. Habiendo quedado más que claro que comer pescado es bueno para tu salud en todos los sentidos, ya solo queda probarlo y disfrutarlo. En
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